GPG México participa en el recorrido de regada tradicional de frutas de la Santa Cruz Angélica Pipi en Oaxaca

En muchos pueblos de origen mesoamericano, mayo es el mes más importante para las festividades porque es el mes que antecede a las primeras lluvias, y las antiguas sociedades eran de origen agrícola, por lo que la lluvia era importante para los pueblos y sus cosechas.

Los antiguos binnizá (gente de las nubes) realizaban ofrendas a las deidades con festividades como labrada de cera, calendas, velas y regadas de frutas, las cuales hacían alusión a temas de la naturaleza (lluvia, pesca y siembra).

Actualmente, estas festividades han aumentado hasta ocupar todo el mes de mayo, ya que no solo son festividades a las cruces, sino que también se realizan festividades por lugar, ocupación e incluso apellidos con estatus social en la comunidad. 

 

Todas estas festividades se rigen por un grupo de personas denominado “socios” y deben cumplir con todas las obligaciones que conllevan. Estas sociedades datan, como mínimo, desde mediados del siglo XIX

 

Algunas sociedades son muy rígidas, pues su afiliación esencialmente se pasa de padres a hijos.

Todas las sociedades se organizan de la misma manera; los miembros incluyen tanto a hombres como mujeres y existe una dualidad correspondiente al liderazgo.

El componente masculino está encabezado por una mesa directiva que consiste en un presidente, un secretario, un tesorero y cinco vocales. 

 

La contraparte femenina está encabezada por la “Guzana gola” (sabia adulta) y sus ayudantes, que varían entre dos y cinco. Tanto la “Guzana gola” como las “Guzanas” (mujeres sabias) son mujeres mayores que disponen del tiempo necesario para cumplir con las responsabilidades que las festividades les imponen.

Las regadas o tiradas de frutas son una tradición que se realiza año tras año en Juchitán desde tiempos antiguos y forman parte de la tradición zapoteca que se lleva a cabo después de la realización de las velas dedicadas a las deidades. Al principio, se regaban frutas cosechadas, pan, café y pescados, pero con el tiempo se modificaron por productos de plástico, alimentos y productos de la canasta básica.

Por ello, el club de música de la Casa Comunitaria Nacanu’ Bií participó con entusiasmo en el Recorrido Tradicional de regada de frutas en honor a la Santa Cruz de la Capilla “Angélica Pipi”, que se llevó a cabo el miércoles 22 de mayo de 2024.

Durante estas regadas, las mujeres y los hombres recorren las calles de la ciudad. Algunos caminan, otros van en carros alegóricos o en caballos. Pero hay quienes van sobre las carretas del campo tiradas por bueyes, adornadas con sauces y flores; estas encabezan todas las regadas de Juchitán y representan el inicio de la festividad. En esta ocasión, nos hicieron una solicitud para que los niños del grupo de música de Nacanu’ Bií pudieran acompañar a los capitanes de carretas durante este recorrido.

El recorrido comenzó en la casa de los capitanes de carretas, la señora Lissette Hernández Aragón, en su domicilio ubicado en la calle 2 de abril, en la primera sección de la ciudad, a las 3:00 pm. Posteriormente, se recorrieron las principales calles de la ciudad y se concluyó a las 7:30 pm en la capilla de la Santa Cruz “Angélica Pipi”.

El Club de Música estuvo ensayando arduamente durante los días anteriores las piezas musicales a ejecutar. Gracias al entusiasmo y dedicación de los integrantes, en conjunto con el apoyo de los padres de familia, se logró ofrecer una presentación vibrante y memorable.

El repertorio incluyó una variedad de piezas que reflejan tanto nuestras tradiciones locales como la diversidad musical que nos caracteriza, interpretadas a través de instrumentos prehispánicos, como caparazones de tortuga y cuernos de venado, la flauta elaborada de carrizo, así como tambores de cuero de chivo y madera, acompañados de instrumentos regionales como tarola, bombo, platillos y saxofón.

Participaron los 15 integrantes de nuestros talleres realizados en la Colonia Lorenza Santiago, Colonia 5 de Septiembre y Casa Comunitaria Nacanu’ Bií, espacios públicos cercanos al parque eólico Bií Hioxo, así como 2 voluntarios Xquendas que llevaron el estandarte característico durante el recorrido y los 10 padres de familia que apoyaron cuidando de los pequeños.

Esta participación ha tenido un impacto en la comunidad y ha hecho que más personas estén interesadas en rescatar la música prehispánica de los ancestros, así como en participar en las actividades de la Casa Comunitaria Nacanu’ Bií.

“Muchas gracias por acompañarnos, levantaron mucho el recorrido. Me comentan que es la primera vez que realizan esta actividad, lo hicieron muy bien. Estoy sorprendida porque son pequeños aún y ya tocan como expertos” – Lizzeth Aragón

 “Quiero extender las felicitaciones para Daniel, Juan y los jóvenes de la Casa Comunitaria, porque este proyecto de música prehispánica es muy importante para la cultura zapoteca y ver que el Parque Eólico Bií Hioxo lo esté impulsando con los niños es maravilloso, muchas felicidades” – Jesús Ruíz Santiago, propietario del PEBH.

 

“Estoy muy orgullosa de mi hijo, ver todo lo que ha aprendido con ustedes. Inició tocando el tambor y ahora ya hace el solo de la flauta de carrizo, muchas gracias por el apoyo que nos dan” – Guadalupe Regalado

Imágenes tomadas durante la jornada:
Es así como GPG México, a través de su parque eólico Bií Hioxo y la Casa Comunitaria Nacanu’ Bií, refuerza su compromiso por preservar la cultura zapoteca, respetando la idiosincrasia local de Juchitán, Oaxaca.
Compartir